Cada azulejo cuenta una historia. Los azulejos forman parte de la identidad portuguesa y embellecen el país de norte a sur. Un testimonio de la influencia duradera de la cultura y el patrimonio árabes en Portugal. Pueden ser coloridos, históricos y artísticos. Todos con un denominador común: demostrar la importancia subyacente de la mezcla cultural en la definición del propio país.