Las terrazas muestran el saber y el ingenio de la gente. El agua corre en levadas y cuando se pone demasiado caliente obedece a reglas del pasado.
En el corazón de la Zona de Paisaje Protegido, la Mata de Margaraça, clasificada como Reserva Biogenética, es muy impresionante. Por entre los ejemplares de la floresta caducifolia primitiva hay también la delicadeza del Lírio Martagão, la imperial sorpresa del Sello de Salomón y cuando el frío llega, los acebos se visten de rojo.