Aún producido artesanalmente, el irresistible queso de Rabaçal se remonta a los orígenes de Portugal. Descrito por el gran Eça de Queiroz como "redondo y divino" en su novela "As cidades e as serras", ¡el Queijo do Rabaçal es una auténtica delicia gastronómica!
Producido en Rabaçal, parroquia del municipio de Penela, a una hora de Coimbra, el Queijo do Rabaçal es un queso madurado de oveja y cabra, de pasta semidura, de color blanco/amarillo y con pocos ojos o ninguno. Se trata de un producto estacional cuyo pico de producción se sitúa entre abril y mayo. Se sigue elaborando a mano a partir de una mezcla de leche de oveja y cabra, utilizando cuajo de origen animal. Es un producto con Denominación de Origen Protegida.
Pero, ¿qué hace que el queso de Rabaçal sea una especialidad? Gran parte de su sabor característico se debe a la planta de Santa María, un tomillo espontáneo (Thymus zygis), abundante en esta zona, que sirve de alimento a las ovejas y cabras que proporcionan la leche para la producción de este queso.
La prestigiosa Queijaria da Licínia, con sede en la aldea de Cotas, vende el mejor queso de Rabaçal. En esta acogedora aldea, encontrará uno de los alojamientos más sorprendentes del Centro de Portugal: las Casas Naturales de Villa Pedra.