Al final de la montaña de Boa Viagem, entre la playa salvaje de Murtinheira y Figueira da Foz, el cabo Mondego es el único punto acantilado de la costa central portuguesa. Un impresionante conjunto de rocas calcáreas arrugadas que invaden el mar. En realidad, este es el lugar para entender la formación del Océano Atlántico.
Con una superficie de 117,67 ha, de las cuales 61,25 ha son marinas y 56,42 ha terrestres, el Monumento Natural del Cabo Mondego está referenciado mundialmente como el mejor y único lugar del planeta donde, desde el punto de vista estratigráfico, es posible observar y estudiar rocas de 170 millones de años de antigüedad pertenecientes al período Bajociano-Jurásico. Debido a esta importancia, ha sido reconocido como Sección y Punto Estratigráfico Mundial.
El Faro del Cabo Mondego está situado en el Parque Forestal de la Sierra de Boa Viagem y data de 1858. Sin embargo, el faro actual se construyó en 1917 y se situó en otro lugar, más al norte. El edificio está formado por una torre central y dos cuerpos longitudinales y el proyecto inicial contaba con una óptica lenticular fresnel de segundo orden alimentada por petróleo. El nuevo proyecto cuenta con innovaciones técnicas, a saber: electrificación general y señales sonoras.
Las visitas al Faro del Cabo Mondego pueden reservarse a través de la Autoridad Marítima Nacional. Las visitas de los miércoles son gratuitas y no requieren reserva previa.