Sus aguas cristalinas son especialmente atractivas durante el verano. El paisaje circundante está habitado por algunas especies animales muy singulares, a saber: anfibios, aves e inofensivas serpientes de agua y una copiosa vegetación.
Merece la pena visitar el acogedor restaurante Guarda-Rios (llamado así por la abundancia de especies en este lugar), que ofrece una vista incomparable de la magnífica cascada Poço da Broca. El restaurante sirve cocina tradicional portuguesa y el servicio es impecable.
¡Una joya preciosa de la Serra da Estrela!